Bajo fuego recoge principalmente los cambios de la sociedad venezolana, vistos dentro y fuera del país, entre 1992 y 2003, es decir, desde el intento de golpe de Estado contra el presidente electo, hasta la pérdida del progreso económico que la nación había acumulado durante cuarenta años de democracia. Ello a partir de los recuerdos de personajes, cuya cotidianeidad sirve de sustrato para las metamorfosis, no solo de Venezuela, sino de España y los Estados Unidos, al encontrarse sus protagonistas viviendo a caballo entre paisajes, lenguas y culturas. De ahí que lo fundamental a destacar sea, justamente, la porosidad de las fronteras por donde las historias circulan de una geografía a otra, privilegiando las voces puestas a hablar desde los márgenes de sistemas, nunca lo suficientemente inclusivos como para darles el espacio que sus crónicas reclaman.

Esta novela es la cuarta entrega de un ciclo titulado Origen-Final, donde también se incluyen: Para repetir una mujer, Amantes y reverentes, Viaje de vuelta y El mundo después (en preparación). Aun cuando ciertos personajes y situaciones ponen en correspondencia los distintos volúmenes, cada uno se lee separadamente, pues lo esencial del proyecto narrativo de Alejandro Varderi es tejer un tapiz anecdótico que la memoria rescate al tiempo y al olvido.