Después del incendio post electoral, ¿es el anuncio del nuevo gabinete una señal de humo para los más moderados?

Platicamos en Blanco y Negro con J.S. Zolliker, creador de la Realidad Novelada

No es gratuito que a partir del

resultado de la elección, en la que Morena y sus aliados resultaron con la

mayoría legislativa, la suficiente para modificar la Constitución, el mismo

presidente saliente saliera rápidamente a poner en claro que “la tercera es la

vencida”, y que sus intenciones de arrinconar a uno de los tres poderes de la

unión por fin se haría realidad.

De llevarse a cabo, las reformas

presentan a un poder judicial debilitado, y a merced del ejecutivo en turno, en

las que este último prácticamente podrá imponer condiciones a pesar de que los

criterios constitucionales contravengan los impulsos presidenciales,

transportados por un legislativo, que bajo esquemas de mayoría dicen

representar la voluntad del pueblo, y que en el mejor de los casos lo hagan

parcialmente, pero que innegablemente tienen también influencias de agendas

distintas, y que bajo esa premisa, también se puede asumir que se encuentra

sometido a un “poder de poderes”, riesgo que las democracias modernas no

deberían correr, a la luz de los resultados de otras naciones, especialmente

aquellas llamadas emergentes.

Con Juan Burgos, mercadólogo y analista político, platicamos y analizamos las implicaciones de los resultados de las elecciones del pasado dos de junio, y lo que se ve en el horizonte para el país.

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